En esta mañana de lluvia tan hermosa, donde las aves visualizan mis manos temblorosas sobre el teclado generoso y testigo a la vez, de la apariencia dubitativa de mi primera crónica, me atrevo a diseñar estas humildes palabras descriptivas, bajo la valiosa iluminación del espíritu santo, quien mitigaba el miedo reflejado en mis manos y fortalecía de sabiduría mi pensamiento.
Primero voy a empezar sobre como fue mí llegada al grupo:
Mi llegada al resto de Israel no fue una coincidencia, sino una Diosidencia reflejada en la voluntad de un gran amigo (Rafael Campo Romero) que cada rato me decía para que fuera a vivir la bonita experiencia de oración espontánea y cercana al señor.
Al llegar a esa cita por primera vez, después del estrés inevitable de Bogotá, mi compadre Rafa me presenta a un grupo de jóvenes que irradiaban en su rostro el amor de Dios y a un joven con una alegría espiritual y una sencillez, que parecía que hace tiempo lo conocía como es el Fray Ramiro Rafael Acosta.
Recuerdo que al terminar la oración me dijo literalmente de manera entusiasmada "de aquí no te vas, ya tu eres de nuestra familia" y desde allí empecé a entender el valioso llamado de Dios a mi corazón, tanto fue así, que en la noche antes de acostarme me preguntaba: Dios mío si me distes sabiduría para componerle al amor, mujeres y costumbres, dámela ahora a través del espíritu santo para sacarte una canción, y a las 8:00 de la mañana del otro día llega a mi mente una melodía espiritual y como agradeciéndole empiezo con esta frase "no soy quien canta aquí, sino es el espíritu santo".
Y ese agradecimiento se extendió al fray Ramiro al mencionarlo en la canción: "gracias Fray Ramiro por insistir, su palabra bonita me lleno de inspiración".
En vista de que el gestor del Resto de Israel se fue para Guapi, el espíritu santo traslada esa palabra bonita a una persona que admiro mucho y que es nuestra guía, nuestro hermano y amigo como es el Fray Marco Alexander Camero. Con él, estamos construyendo sin afanes, con mucha humildad y con la ayuda de Dios, esta hermosa edificación del Resto de Israel cimentada bajo la luz de nuestro señor Jesucristo, la Virgen Maria y San Francisco de Asís, para poder diseñar la hermosa maqueta de una comunidad unida, humilde, sencilla y abierta a todo el mundo.
Así como uno se matricula a un curso de Ingles para poder hablarlo, nosotros el 20 de Mayo de 2007, a través de la consagración, nos matriculamos al compromiso de realizar el curso en el Resto de Israel, para que poco a poco podamos descubrir y hablar el verdadero lenguaje del señor.
Una consagración con una ceremonia muy bonita, presenciada por el Padre Luis Angel, quien nos dio los parámetros para reflexionar sobre "cual es el concepto que tengo yo de Dios". Después hubo una celebración con torta, baile y mucha alegría por el valioso compromiso que estamos asumiendo. Alegría que fue truncada a las 7:00 de la noche cuando nos avisaron que a las hermanitas les habían robado, pero a la vez teníamos todas las fuerzas del espíritu santo para afrontar cualquier problema y buscarle la mejor solución, donde solo se escuchaba "hermanas no se preocupen, ustedes cuentan con el apoyo de todos nosotros" convirtiéndose el hecho del robo en un problema pequeño, porque había en nuestros corazones la esperanza y la fe generada por el Señor y la Virgen Maria.
Con la Vigilia de Pentecostés realizada el día 26 de Mayo de 2007, conocimos el verdadero significado de los dones de la virtud, el entendimiento, la sabiduría, la piedad y percibimos desde nuestra alma inquieta la tranquilidad del consejo del amor de Dios.
Queridos amigos y hermanos, cualquier error en la descripción ocasionado por mi flaqueza humana, ruego me disculpen y me den una orientación para el perfeccionamiento de las crónicas que voy a realizar posteriormente. Que Dios los Bendiga y los Guarde.
JAIRO ARTURO FONTALVO SARMIENTO
Cronista Resto de Israel
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